Los grandes empresarios peruanos siguen revelando aportes a Keiko Fujimori

654
0

[ad_1]

El último aporte fue admitido este jueves por José Ignacio De Romaña, vicepresidente de la empresa minera Volcan, quien dijo que su empresa dio 260.000 dólares a una campaña de empresarios para financiar a Fujimori en 2011, cuando se enfrentó a Ollanta Humala, quien finalmente ganó esa elección.

El Grupo Volcan explota y comercializa plomo, plata y zinc en diferentes regiones del país y exporta la mayor parte de su producción hacia China.

De Romaña declaró, como testigo, ante el fiscal José Domingo Pérez, integrante del equipo del equipo especial que investiga el caso Lava Jato en Perú, mientras que otro de los directivos de la minera, José Picasso Salinas, no se presentó a la diligencia.

LOS OTROS APORTES

Además de la última revelación de Volcan, este miércoles se conoció que la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) entregó 240.000 dólares a una campaña de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep) que buscaba favorecer, indirectamente, la campaña de Fujimori en 2011.

Esta contribución fue revelada por ante el fiscal Pérez por José Graña, exdirectivo de la empresa constructora Graña y Montero, quien sostuvo que entregó 25.000 dólares a Capeco.

Graña dijo que el dinero del gremio de la construcción fue transferido a la Confiep, que promovió una campaña publicitaria a favor de la empresa privada en el contexto de esas elecciones.

Los también empresarios Roque Benavides, dueño de Minas Buenaventura, y Alfredo Pérez Gubbins, gerente general de la empresa de alimentos Alicorp, han admitido que colaboraron con esa campaña, con 200.000 dólares, en cada caso.

LA REVELACIÓN DE CREDICORP

El escándalo por los aportes no declarados a la campaña de Keiko Fujimori comenzó este lunes, cuando Dionisio Romero, presidente del directorio del grupo Credicorp, el más grande del país, reveló que entregó 3,65 millones de dólares en 2011.

Romero justificó esa donación, entregada en efectivo, señalando que los que creen “en el desarrollo y progreso del Perú” vivieron “la zozobra” de que Humala estuviera siendo financiado por el régimen del entonces presidente venezolano Hugo Chávez.

Al día siguiente, el empresario Vito Rodríguez, presidente del Grupo Gloria, también afirmó ante la Fiscalía que aportó 200.000 dólares a la campaña de 2011 de la líder del partido Fuerza Popular.

El presidente del Grupo Gloria, que tiene operaciones en toda Latinoamérica, detalló que dio el dinero directamente a Fujimori en un maletín y que fue suyo y no del Grupo Gloria.

LAS REACCIONES

Ni bien se conoció la revelación del millonario aporte de Credicorp, el expresidente Humala afirmó que durante la campaña electoral se enfrentó “a los que se creían dueños del Perú” y logró derrotar a Keiko a pesar de que fue “calumniado”.

Lo dicho por Romero también propició un pronunciamiento de Fujimori, quien señaló en Twitter que no habló antes sobre esa donación por cumplir “el compromiso” que asumió de mantener “la reserva de los aportes de campaña privados”.

Sin embargo, el abogado de Dionisio Romero, José Ugaz, contradijo la declaración de Keiko y sostuvo que “en ningún momento se ha habló de un pacto expreso o una imposición” para guardar silencio.

LA SITUACIÓN DE KEIKO

Tanto analistas como políticos, coinciden en que estos testimonios complican la situación de Keiko Fujimori, ya que abre nuevas vías para otra investigación fiscal sobre sus finanzas personales por presunta evasión tributaria y lavado de activos.

La líder opositora cumple desde hace más de un año 18 meses de prisión preventiva por presuntamente haber recibido 1 millón de dólares de procedencia ilícita de Odebrecht, tal como han declarado ante fiscales los exrepresentantes de la empresa en el país.

La Fiscalía ha recabado, además, los testimonios de otros testigos protegidos y colaboradores, el principal de ellos el empresario Jorge Yoshiyama, sobrino del exjefe campaña de Keiko, quien ratificó que sí se recibió dinero de Odebrecht y este fue justificado mediante falsos aportantes.

Yoshiyama señaló que Keiko sabía de estos aportes e incluso buscó que el ex juez César Hinostroza, actualmente a la espera de ser extraditado desde España, la favorezca en una casación que interpuso para que se desestime la investigación contra ella.