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Un nicaragüense de 60 años fue condenado este miércoles a 40 años de prisión por drogar y abusar sexualmente de sus dos hijastras, de 12 y 11 años.
El juez Tercero Especializado en Violencia de Managua, Edén Aguilar Cano, impuso esa pena contra el nicaragüense, de iniciales M.L.L.K., que violó a sus hijastras entre 2017 y 2018, hasta que fue descubierto por la abuela de las menores.
Sin embargo, el acusado deberá cumplir efectivamente 30 años de prisión porque la Constitución Política de Nicaragua establece que no se impondrá pena o penas que aisladamente o en conjunto duren más de 30 años, según la sentencia.
El condenado no podrá salir de la cárcel antes del 21 de agosto de 2049, indicó el juez.
Según la acusación de la Fiscalía, el hombre aprovechaba cuando se quedaba con las dos niñas, a quienes les frotaba un líquido en el rostro que las adormecía y luego las llevaba al cuarto, en donde las violaba.
Primero el hombre se ganó la confianza de las dos menores con obsequios y dinero, a la vez que les hacía insinuaciones sexuales, de acuerdo con la acusación.
El hombre cometió las violaciones contra ambas niñas entre agosto de 2017 y 2018, hasta que la abuela de las víctimas lo descubrió y lo denunció en la Policía.
La madre de las niñas, que conoció al hombre en un bar y luego formalizó la relación, respaldó la acusación y aseguró, además, que su expareja practicaba la brujería.
Durante el juicio, el acusado dijo primero ante el juez que todo se trataba de un invento de su expareja y negó los cargos.
Sin embargo, luego que las niñas declararon ante el juez las aberraciones sexuales que sufrieron, el hombre confesó los hechos.
En la audiencia de debate de pena, el Ministerio Público había exigido 20 años de prisión por cada niña violada, en tanto la defensa había solicitado 15 años por cada una.
