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En concreto, la Policía endurecerá el control del tráfico de camiones, responsables de al menos tres de los cuatro accidentes mortales registrados.
El primero de los sucesos tuvo lugar en la tarde del jueves en el barrio de Sunset Park, en Brooklyn, cuando un hombre de 85 años fue atropellado por un camión al cruzar la calle y falleció poco después en un hospital de la zona.
Apenas una hora y media después, una mujer de 26 años fue arrollada por otro camión en el barrio del Soho, una de las zonas más concurridas de Manhattan.
Según testigos citados por medios locales, la víctima estaba cruzando un paso de peatones cuando fue alcanzada por el vehículo, que estaba dando marcha atrás.
A primera hora del viernes, también en Manhattan, falleció un hombre golpeado por un camión de recolección de residuos de una empresa privada.
El conductor del camión, que supuestamente giró y atropelló a la víctima en un cruce señalizado para peatones, fue acusado por no ceder el paso a un peatón y por no darle auxilio, según la Policía.
La cuarta víctima mortal se registró unas horas después en el barrio de Gowanus, en Brooklyn, cuando un hombre de 57 años fue golpeado por un camión al cruzar la calle y luego arrollado por otros dos vehículos, según la cadena local NY1.
“Cualquier pérdida de vida es inaceptable”, señaló a través de Twitter el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, que anunció que el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) va a reforzar la vigilancia del tráfico de camiones para mantener a los peatones seguros.
“Estamos investigando las recientes muertes de tráfico en nuestra ciudad y mi corazón está con las familias de las víctimas”, añadió.
En los últimos años, Nueva York ha puesto en marcha una gran campaña con numerosas medidas para tratar de reducir el número de accidentes de tráfico, que habitualmente se cobran cada año más de 200 vidas en la Gran Manzana.