“Con el alma en un hilo”, así está el mundo en medio de la pandemia del coronavirus. Debido a esta enfermedad, son muchos los que deben mantenerse alejados, bien sea para no contagiar a otros, o en su defecto, como medida preventiva.
Para darle pausa a la inquietud, es hora de recomendar unas cuantas películas de epidemias que han causado impacto a llo largo de los años.
En el presente siglo XXI, las producciones cinematográficas sobre pandemias se han multiplicado, y no es que antes no se hicieran, pero no tantas como ahora.
- Pánico en las calles (Elia Kazan, 1950)
Podría tomarse como el primer ejemplo digo de mención. Una cinta de cine negro que logró adjudicarse un Oscar a la mejor historia. Además, el crítico Patrick Peters sijo en la revista Empire que el director “hace un uso atmosférico y pseudodocumental de sus ubicaciones en Nueva Orleans y extrae actuaciones naturalistas de un excelente reparto”.
- El séptimo sello (Ingmar Bergman, 1957)
Desde su estreno ha estado repleta de elogios. Recibió el Premio Especial del Jurado en el Festival de Cannes. En The New York Times, Bosley Crowther escribió que se trata de “una contemplación penetrante y poderosa del paso del hombre por esta tierra. Esencialmente intelectual, pero también emocionalmente estimulante”.
Por su parte, Peter Bradshaw, en The Guardian, que es “una obra de arte radical”, todavía “tan fresca como un vaso de agua helada”, y “un estándar de oro intachable de seriedad artística y moral”. Y en AV Club, Zack Handlen valora “sus sorprendentes imágenes, humor obsceno y sufrimiento sombrío”, en “una película humana sobre la inevitabilidad inhumana de la muerte”.
- Muerte en Venecia (Luchino Visconti, 1971)
Otro filme de culto con cuatro premios BAFTA del que Ángel Fernández-Santos apuntó en El País: “Se trata de un filme complejo, incluso en sus defectos, y que, para Visconti, supuso un compromiso personal grave, del que supo salir en parte con dignidad y en parte haciendo trampas”. Dan Jardine la describió como “un festín visual suntuoso” en la Apollo Guide.
- La amenaza de Andrómeda (Robert Wise, 1971)
El difunto Roger Ebert publicó en el Chicago Sun-Times que es un “espléndido entretenimiento que te hará preocuparte sobre si podrán contener esa extraña gota de cristal verde alienígena”.
Tony Mastroianni comentó en el periódico Cleveland Press: “No hay nada malo con la fórmula cuando funciona, y funciona sin esfuerzo en esta película”.
- El puente de Cassandra (George Pan Cosmatos, 1976)
- Estallido (Wolfgang Petersen, 1995)
Se refiró Fred Topel en About como una “película de miedo con representación realista de la enfermedad”. Rita Kempley la consideró “un puntazo absoluto” en The Washington Post. En San Francisco Chronicle aseguró Mick LaSalle que “es una película lo suficientemente buena como para querer ir al cine y lo suficientemente aterradora como para hacerte preguntarte si debes evitar las multitudes”.
- Doce monos (Terry Gilliam, 1995)
Es uno de los filmes más recordados y queridos con epidemias mortales; Ed Potton afirmó en The Times que “esta ciencia ficción distópica que viaja en el tiempo es un recordatorio de que el director puede hacer películas que sean visualmente inventivas, intelectualmente interesantes y francamente emocionantes”.
- Hijos de los hombres (Alfonso Cuarón, 2006)
Le concedieron dos premios BAFTA, una obra sobre la que Jim Schembri escribió para The Age: “las escenas no solo te sacudirán, sino que te harán revisar tus expectativas sobre cuán realistas pueden ser las representaciones cinematográficas del combate”.
Joshua Rothkopf dijo lo que sigue en Time Out: “Bregando inquebrantablemente a través de las peores horas de la humanidad, la película entrelaza las incursiones de la narrativa en la ciencia ficción con una dinámica desgarradora”.
- Contagio (Steven Soderbergh, 2011)
La propuesta con mayor realismo al enseñar cómo se desarrolla una epidemia incontrolable en nuestro mundo de la globalización. A Luis Martínez le parece, según lo que publicó en El Mundo, que “es tan efectiva —sin concesiones— como la peste bubónica del pasado”, y “el terror se mastica en cada fotograma como algo perfectamente real” porque “mañana mismo puede suceder lo que anuncia” el filme.
Y en la revista Cinemanía dijo Nando Salvá que es “un thriller tan veloz e implacable como una gripe”, y “la mejor película hecha a día de hoy acerca de una pandemia”.